La economía de China no retoma impulso y ya muestran signos preocupantes. El dato más relevantes es la fuerte caída del comercio exterior. Las exportaciones de China bajaron con fuerza en marzo, con un retroceso de casi 15% en un año, acompañadas también por un descenso de sus importaciones del 12,7%, Esta debilidad que muestra el gigante asiático impulsó al Banco Mundial a recortar las previsiones de crecimiento para el 2015 de China y de toda la región de Asia Oriental. Según el informe de la Administración General de Aduanas en Beijing el superávit comercial del país se desmoronó en marzo un 62,6% y llegó a u$s 3.000 millones. Estas estadísticas confirman la fragilidad actual de uno de los tradicionales motores de crecimiento del líder mundial del comercio de bienes manufacturados. "La caída en la cifra de las exportaciones se debe principalmente a la debilidad de la demanda global, mientras que la apreciación en dólares frente a otras monedas en el trimestre pasado también fue negativa para las exportaciones de China", dijo Nie Wen, estratega de Hwabao Confianza en Shanghái. "Se necesitan más medidas de estímulo en el futuro", agregó. Según el organismo multilateral con sede en Washignton, la región en desarrollo de Asia oriental y el Pacífico (EAP), que incluye a China, crecerá sólo un 6,7% tanto en el 2015 como en el 2016, frente a la expansión del 6,9% que registró en el 2014. Esa cifra es inferior a su pronóstico anterior de octubre de un crecimiento del 6,9% para este año y de un 6,8% para el 2016. En términos de volumen, las importaciones de carbón, por ejemplo, se desplomaron más de un 40% en el período entre enero y marzo. El anémico desempeño del comercio exterior podría dañar el empleo, que el Gobierno quiere proteger ya que una alta tasa de desocupación podría provocar descontento social. Pero analistas dijeron que el desglose de los datos mostraba claramente que las exportaciones de marzo fueron afectadas por un yuan más fuerte, que se vincula a la fortaleza del dólar. Eso contribuyó a reducir las ventas de China a Europa. Los envíos a la Unión Europea mostraron la mayor caída en más de un año, igual que los a Japón. Según el informe del Banco Mundial , el crecimiento de China es probable que disminuya debido a las políticas destinadas a poner a su economía sobre una base más sostenible y hacer frente a las vulnerabilidades financieras. La actividad económica de China se desaceleraría a un 7,1% en el 2015 y a un 7% en el 2016, frente al 7,4% del 2014. El pronóstico anterior era de un crecimiento del 7,2% y 7,1% respectivamente Aunque el Banco Mundial considera que una retracción más fuerte es poco probable debido a que la segunda economía del mundo goza de mecanismos amortiguadores incluyendo grandes reservas en moneda extranjera y un amplio espacio fiscal para implementar estímulos o rescatar a los deudores. Según el organismo internacional, las "altas tasas de interés en Estados Unidos y un dólar apreciándose, asociados a la divergencia de la política monetaria en las economías avanzadas puede elevar los costos de endeudamiento, generar volatilidad financiera y reducir las entradas de capital más rápidamente que lo anticipado" en toda la región. Sin embargo, la perspectiva de un período sostenido de bajos costos del petróleo puede contrarrestar estas dificultades y ayudar a apuntalar la zona.