La política que mantienen en forma coordinada el Ministerio de Economía y el Banco Central de dejar atrasar el tipo de cambio respecto de la tasa de inflación interna y más aún de la variación de los salarios, volvió a manifestarse en un singular subsidio del turismo internacional para los residentes. Por el contrario, ese fenómeno contribuyó a desalentar el arribo al país de extranjeros, porque, para peor, en los últimos meses, salvo los norteamericanos y algunas otras pocas excepciones, los habitantes del resto del mundo se ven afectados por la depreciación de sus monedas y el consecuente encarecimiento de sus programas de viajes fuera de sus fronteras. Así, el informe del Indec sobre Evolución del Turismo dio cuenta de que "en julio se estimó un total de 459,7 mil turistas no residentes que ingresaron al país a través de todos los pasos, representando una disminución interanual de 4,3%" y cinco meses consecutivos de caída interanual ininterrumpida. "Las salidas al exterior de los argentinos fueron 602,0 mil turistas, 24,3% mayor que el de un año atrás", acumuló ocho meses consecutivos de incremento. Mientras que en términos de las divisas que habrían gastado, el relevamiento oficial indicó que en el caso de los residentes en julio sumaron poco más de u$s290 millones, acumulando siete meses seguidos de crecimiento; en tanto, los extranjeros dejaron en el país en julio menos de u$s210 millones. De ahí surgió un déficit para las arcas del Banco Central por ese concepto de unos 82 millones de dólares. Pero además, a ese saldo negativo que estimó el Indec con datos del Ministerio de Turismo se agregan los derivados de los pagos previos a prestadores de servicios, los cuales virtualmente superan en cinco veces, de acuerdo con el balance cambiario que trimestralmente hace la autoridad monetaria, esto a un ritmo deficitario de poco más de u$s500 millones. Durante los siete meses de 2015, arribaron un total de 3,5 millones de turistas no residentes, verificando un aumento interanual de 0,6%. Las salidas de argentinos alcanzaron los 4,9 millones, creciendo 13% con respecto a igual período de 2014. En divisas, para el Indec ingresaron u$s1.677,2 millones de dólares y salieron de las fronteras por viajes u$s2.534,3 millones, arrojando un rojo de u$s857 millones. Sin embargo, la proyección para el balance cambiario se habría acrecentado de u$s3.071 millones que informó el Banco Central hasta junio a unos 3.600 millones de dólares.