La suba incipiente de depósitos en moneda extranjera que se vislumbraba en los primeros días de diciembre no sólo se mantuvo sino que se aceleró dramáticamente en las últimas dos semanas del año. Como resultado, las colocaciones en dólares subieron el mes pasado u$s 1.700 millones y finalizaron por primera vez desde mayo de 2012 por encima de los u$s 10.000 millones. Del 20 al 31 de diciembre (apenas siete jornadas hábiles) los plazos fijos en dólares aumentaron nada menos que u$s 1.500 millones y en todo el mes la cifra creció hasta los u$s 1.700 millones. La razón principal hay que buscarla en la exención impositiva vigente sobre este tipo de colocaciones, ya que el monto depositado queda exento del Impuesto a los Bienes Personales. Semejante salto revela que mucha gente optó por depositar las divisas que había retirado del sistema a través de la compra de dólar "ahorro". Sólo en 2015 el Central vendió cerca de u$s 7.000 millones a través de este esquema, con fuerte impacto en el nivel de reservas. La buena noticia es que ahora parte de esos dólares retirados del sistema volvieron. La incógnita es si sólo se trata de un fenómeno que durará unos pocos días o son dólares que retornaron, sumando liquidez en dólares para los bancos. Ya sin cepo cambiario, es esperable que buena parte de estos recursos permanezcan dentro del sistema financiero, ya que el temor a que suceda una pesificación (como pasó en los primeros tiempos del cepo cambiario) se han reducido sustancialmente. Todos los diciembre se produce un repunte en los plazos fijos en dólares debido a la exención fiscal, pero en este caso la suba fue sustancialmente más alta. Por ejemplo, el último mes de 2014 el incremento no había superado los u$s 400 millones, la cuarta parte de lo que aumentó ahora. El stock de depósitos en moneda extranjera del sector privado finalizó el 31 de diciembre (de acuerdo al último dato publicado por el BCRA) a u$s 10.617 millones. La cifra es la más alta desde mayo de 2012, pocos meses después de que el Gobierno estableciera el cepo cambiario. Los depósitos del sector público en dólares representan así apenas 12% del total y apenas superan los u$s 1.500 millones. Otro de los motivos que también alentaron la suba de colocaciones en moneda extranjera es el aumento de las tasas para este tipo de depósitos, como salió a ofrecer el Banco Santander Río, con rendimientos superiores al 4% anual para plazos de 30 días. La propia institución lanzó luego una línea de financiamiento de prefinanciación en dólares para exportadores, aprovechando el aumento de este tipo de colocaciones. El aumento de u$s 1.700 millones (20%) que tuvieron los plazos fijos en moneda extranjera significó además un impulso en las reservas, ya que esas divisas se encajan en la cuenta corriente del Banco Central y pasan a formar parte del stock de la entidad que preside Federico Sturzenegger. De hecho, en las semanas posteriores al inicio de la presidencia de Mauricio Macri las reservas subieron u$s 1.100 millones, sin que la entidad haya intervenido en el mercado cambiario. Semejante suba de colocaciones en dólares no deja de ser un dato que muestra mayor confianza por parte de los inversores ante el cambio de administración. Aunque todavía están lejos los u$s 15.000 millones que había antes del cepo cambiario, no sería extraño que se mantenga el crecimiento de colocaciones en moneda extranjera ante el incremento de las tasas y el levantamiento de restricciones cambiarias.