La Cámara de Comercio de Córdoba manifiestó ayer su preocupación por el paro general convocado por la CGT para el lunes 25 de junio y afirmó que “rechaza la adhesión de la Federación Argentina de Empleados de Comercio y Servicios (FAECyS)” a la medida de fuerza.
“Los empresarios estamos haciendo un esfuerzo muy grande por mantener las fuentes de trabajo. Los números no cierran y cada día que pasa perdemos competitividad. Estas medidas no ayudan en nada; contrariamente, ponen en riesgo el empeño y sacrificio por sostener al mercado en momentos tan difíciles como los que está atravesando el país”, sostuvo el presidente de la entidad Darío Brasca.
La CGT convocó al tercer paro nacional desde que asumió el presidente Mauricio Macri en diciembre de 2015. Lo hace en rechazo a la política económicas y el acuerdo con el FMI.
Además había reclamado soluciones en cinco puntos, pero el gobierno sólo dio respuestas en favorables en dos: el reintegro de fondos a las obras sociales sindicales y la no modificación de las indemnizaciones por despido. Sin embargo no aceptó los planteos cegetistas de paritarias libres y sin techo, no descuento de Ganancias del medio aguinaldo, y compromiso político a que no haya despidos en el sector público y privado hasta fin de año.
“Dejando de lado el derecho de todo sector de manifestar sus reclamos, la entidad considera que este tipo de medidas y métodos, desalientan, aún más, el crecimiento y posibilidad de desarrollo del sector”, expresa el comunicado de la Cámara cordobesa.
Señala que desde que se inició 2018 y “de acuerdo a los resultados de los observatorios de actividad comercial difundidos, el sector ha venido perdiendo ventas mes a mes, convirtiéndose en uno de los más castigados por la recesión económica”.
Por último afirma que “la entidad aboga, una vez más, por el encausamiento de los reclamos bajo un marco institucional válido y a través de una mesa de diálogo entre las partes involucradas, de manera que se garantice el normal funcionamiento de las diferentes actividades”.
