La venta de combustibles tuvo en noviembre su tercera caída consecutiva. Si durante los primeros meses del año los automovilistas consiguieron mantener en positivo el nivel del consumo pese a los aumentos de precios -aunque se vio un persistente abandono de los productos premium a favor de los súper- desde septiembre el mercado empezó a caer: retrocedió 6,6% ese mes y 2,84 % en octubre.
Y, en noviembre, la última cifra disponible, la baja se incrementó a 8,26%, según datos de la Secretaría de Energía difundidos por el sitio especializado Surtidores.com.ar. La caída frente a octubre fue de 2,21 %.
Como los meses anteriores, la nafta premium (que ya se cotiza a más de $ 44 el litro) fue la más golpeada, con un descenso de 30 por ciento.
Parte -no toda- de esa caída la absorbió la nafta súper, cuyo consumo avanzó 2,74% en noviembre, con un precio de $ 37,60 a $ 42, según el barrio donde se ubique la estación de servicio y la marca.
En cuanto al gasoil, cayó tanto el premium como el común. El primero cayó 9%, mientras que el segundo descendió 7,88%.