La inflación de junio será quizá la más baja en lo que va de 2019, pero aún será elevada. Los analistas ubican al IPC entre un 2,1% en el número más optimista, hasta un 2,7%. No obstante, sin aumentos de tarifas relevantes y con el dólar planchado en el sexto mes del año, la inflación núcleo persiste y se ubica por arriba del nivel general, más cercana a un 3%. La inercia inflacionaria es la que lleva a que se sigan indexando algunos precios.
Una nota de El Cronista da cuenta que en EcoGo, el relevamiento de precios les dio 2,6% respecto del mes anterior, una suba de 22,5% en el primer semestre, con un aumento interanual de 54,9%. Sin embargo, la core estuvo en niveles similares a los del mes previo y llegó a 3,2% mensual, "mientras que la variación interanual se ubicó en 58,1% y acumula en los primeros seis meses del año una suba de 24,2%".
Así, mientras que la núcleo creció un 3,2% en junio, los precios estacionales registraron una suba del 1,8% mensual y, los regulados, un incremento del 1,3% respecto al mes anterior.
Juan Ignacio Paolicchi dijo que "la estabilidad cambiaria contribuyó a la dinámica de la inflación de junio". Sobre la núcleo, que aún está en niveles elevados, explicó: "Si bien el impacto de regulados y del tipo de cambio se fue diluyendo, hay precios que se regulan por inflación pasada", describió.
En Ecolatina, Matías Rajnerman contó que les dio 2,7% la inflación de junio, con una IPC núcleo de arriba de 3%. "La primera quincena nos había dado un 3%. La desaceración en la segunda mitad fue importante: dio un poco menos de lo esperado, debajo de 2,5%. Con dólar planchado y que ajuste de tarifas ya habían tenido lugar, veníamos proyectando ese número", sostuvo.
Que la "core"sea más elevada lo explicó debido a que los estacionales crecieron muy poco en abril y mayo y, además, "si bien el ajuste de tarifas de servicios públicos prácticamente se anuló, sus efectos de segunda ronda siguen presentes e impactan sobre la núcleo".
Alertó que pese a que la segunda quincena dio bien en el IPC que elaboran, creen que en julio se va a volver a acelerar "por efectos estacionales, ya que las vacaciones de invierno tiene efecto en los precios, y porque también la estabilidad cambiaria dio todo lo que tenía por dar". En esa línea dijo que "por más que el dólar siga planchado la inflación no se va a seguir desacelerando. Claro que si se acelera, va a volver a subir, pero la estabilidad cambiaria ya no ayuda, no resta más".