Con una baja del 7,3% en las ventas de los autoservicios, almacenes y grandes cadenas de supermercados en diciembre, el 2019 finalizó con una caída de la misma intensidad (7,3%), según las estimaciones de la consultora Scentia.
Ayer, también se conoció la estimación de la consultora Nielsen (en este caso, exclusivamente sobre las ventas de las grandes superficies). La merma promedió el 8,8% en diciembre. En tanto, el deterioro más pronunciado se detectó entre las góndolas de la Capital Federal y el Gran Buenos Aires (-10,6%) versus aquellas del interior del país (-7,8%).
La razón de peso detrás de la caída del consumo masivo es la pérdida del poder adquisitivo de los consumidores frente a la inflación. Al respecto, la consultora Ecolatina, explicó en su último informe: "si bien durante los últimos años se instauraron las cláusulas de renegociación ante una inflación efectiva mayor a la esperada (como ocurrió en 2018 y 2019), la suba de salarios terminaron corriendo detrás del alza de los precios. Por caso, el salario real de la economía cayó en promedio 6,3% en 2018 y exhibirá una contracción media superior a 8% en 2019, producto de una inflación mayor a la esperada", señaló.
La aceleración de los precios en los comercios volvió a la carga en el último mes del año, cuando suele haber un repunte del consumo por Fin de Año y que esta vez, coincidió con el recambio de Gobierno. En este contexto, los precios en los distintos canales, que habían experimentado una ligera desaceleración en noviembre, volvieron a pegar un salto del 3,7% en el precio promedio ponderado. Con lo cual, en el año, este indicador acumuló una suba del 49,6%.