El Gobierno trabaja ahora en dos frentes a resolver en materia de deuda: a la ya conocida oferta del tramo de títulos en dólares bajo ley internacional, esta semana enviará al Congreso el proyecto de ley para comenzar con la otra parte, la emitida bajo legislación local.

Según confiaron fuentes oficiales y publica Clarín la intención es presentar entre miércoles o jueves la propuesta para reestructurar unos US$ 13.700 millones que están en manos del sector privado y que fueron reperfilados hasta el 31 de diciembre, es decir, postergado su pago hasta esa fecha.

Dentro de este esquema hay una parte relevante del esquema previsto que se verá modificado: estaba planeado que el 7 de agosto se hiciera la primera emisión de deuda en dólares del Gobierno de Alberto Fernández.

Esta emisión, anunciada semanas atrás por unos US$ 500 millones para ese día (a la que suman otras dos, en septiembre y noviembre por otros US$ 500 millones, respectivamente), se postergó ahora a septiembre, aseguraron fuentes oficiales.

Las razones radican en que, para llevarla a cabo, esperan concretar la reestructuración de deuda a nivel internacional primero. El esquema actual deja abierto el canje hasta el 4 de agosto, anuncia los resultados el 7 de agosto, y el 4 de septiembre se efectúa la liquidación, es decir, el intercambio de los bonos viejos por los nuevos.

Entonces en el Gobierno ven que la emisión que estaba prevista para el 7 de agosto se postergará hasta luego del 4 de septiembre.

Según aseguraron, en el canje de deuda local se ofrecerán iguales condiciones que a los acreedores de bonos bajo ley internacional, algo que lo mencionó Martín Guzmán en varias oportunidades. “Se está trabajando con mucho cuidado en la equivalencia bajo este objetivo”, sostuvieron.

Reconocieron que a algunos tenedores de bonos se ofrecerá la posibilidad de canjear sus títulos en dólares por otros denominados en pesos que ajusten por inflación (CER).

“Es una opción de salida para cierto universo de títulos en dólares. Estamos cerrando el proyecto de ley con todos sus anexos. Allí va a figurar el detalle completo de nuevos instrumentos, relaciones de canje, entre otras cuestiones”, agregó.

Pero no era fácil: a la compleja estructura financiera que había que armar, se tenía que implementar un sistema que sorteara los controles de capitales, normas que Guzmán reconoció en más de una oportunidad que hay que derribar pero también que hoy no es el momento.

Con la presentación en el Congreso del proyecto de ley para reestructurar la deuda bajo legislación local en el Gobierno también buscan dar otra señal (que es de hecho lo que reiteran varios funcionarios): que en el tramo internacional, la oferta de canje que se presentó ante la Comisión de Valores de Estados Unidos (SEC, por sus siglas en inglés) es la “máxima y última”, más allá del rechazo de algunos grupos de bonistas, como Ad Hoc y Tenedores de Bonos de Canje.

Desde Quantum Finanzas, la consultora de Daniel Marx, identificaron que “las menciones de tratamiento similar a las obligaciones de las distintas jurisdicciones están en reiteradas declaraciones de funcionarios del Gobierno efectuadas en los últimos meses. Estas manifestaciones dieron lugar a que, desde mediados de mayo, comencemos a notar mayor recuperación relativa en los precios de deuda bajo legislación argentina respecto de la de ley extranjera.