El ministro de Economía, Martín Guzmán, recibió a la delegación del Fondo Monetario Internacional (FMI). El objetivo de este encuentro fue empezar las nuevas negociaciones para un nuevo programa de apoyo de la institución. Argentina espera que le permita refinanciar cerca de US$ 43.900 millones de deuda que vencen en los próximos años.
La cumbre fue encabezada por la directora adjunta del departamento del Hemisferio Occidental, Julie Kozack. Estuvieron presentes Sergio Chodos (el representante de Argentina ante el FMI), Luis Cubeddu (el jefe de la misión del FMI para Argentina) y Trevor Alleyne (el representante residente del FMI en Argentina).
Al finalizar, ambas partes consideraron que la reunión fue “productiva”. Ahora la misión del FMI continuará su trabajo y mantendrá otros encuentros con funcionarios del Gobierno en los próximos días, así como con privados. Sin embargo, aún no se sabe cuánto tiempo estarán en el país, pero se estima que la visita tendrá una extensión de dos semanas.
Guzmán había anticipado que el nuevo programa no sería un Stand-By Agreement (SBA) como el firmado durante la gestión de Cambiemos sino un Extended Fund Facility (EFF). Guzmán buscará diferir el calendario de repago de la deuda actual (US$ 44.000 millones) y empezar a pagar recién en 2025, haciendo la menor cantidad de concesiones posibles.
Un FMI menos ortodoxo que antes, el contexto pandémico y el rotundo fracaso del SBA de 2018-2019 ayudarán en ese sentido, aunque Guzmán deberá ceder también, sobre todo en el frente fiscal.
Durante la última misión, la delegación permaneció en el país cinco días, entre el 6 al 11 de octubre. Al finalizar su estadía, el organismo multilateral aseguró haberse llevado “una comprensión más profunda de los planes de políticas de las autoridades para estabilizar la economía y ponerla en una senda de crecimiento más sostenible y uniforme”.
“Argentina enfrenta dificultades económicas y sociales complejas, en el contexto de una crisis de salud sin precedentes. La profunda recesión ha provocado un aumento de los ya elevados niveles de pobreza y desempleo, cuyos efectos se ven agravados por importantes presiones en el mercado cambiario”, había señalado en un comunicado.
