Horas antes de la reunión de Alberto Fernández con la presidenta del Fondo Monetario Internacional (FMI), Kristalina Georgieva, la mayoría oficialista del Senado que controla Cristina Kirchner aprobó este jueves un proyecto de resolución que le solicita a Alberto Fernández utilizar los 4320 millones de dólares que enviará el organismo para paliar los efectos recesivos de la pandemia y no en cancelar deuda con contrajo Mauricio Macri o la que defaulteó con el club de París.

Así lo dispone una iniciativa presentada por el oficialista Oscar Parrilli, quien aseguró que no se trata de un condicionamiento sino de una ayuda, motivo de chanzas de la oposición, en un debate que duró más de 5 horas. Si bien el proyecto de resolución no es vinculante, cualquier acuerdo por la deuda debe ser respaldado en el Congreso.

"Lo que estamos haciendo es precisamente apoyando, ayudando y colaborando con nuestro Gobierno y obviamente con el señor ministro de Economía para lograr la mejor negociación y la mejor relación posible con las actuales autoridades del Fondo Monetario Internacional", esquivó la interna el neuquino.

El radical riojano Julio Martínez no lo entendió así: "Este proyecto, a mi juicio, es sumamente innecesario, pero hay un problema hacia el interior del Gobierno: hay dos proyectos que chocan, chocan y chocan a cada rato, y que traen consecuencias institucionales, políticas y hasta económicas", atacó.

En la declaración, los senadores condicionan a "financiar la puesta en marcha de políticas públicas tendientes a resolver los graves problemas de la sociedad argentina derivados de la pandemia de COVID 19", los 4320 millones de dólares en Derechos Especiales de Giro (DEG) del FMI que el Gobierno recibirá, como parte de un desembolso de 650 mil millones en esa moneda que el organismo hará entres sus países miembros.

Y solicita que no se utilicen para "el pago de la deuda por capital, intereses o gastos, que el país mantiene con dicho organismo financiero internacional y/o con otros países englobados en el Club de París y que en ambos casos se encuentran en vías de negociación".

"Guzmán tendrá que explicar por qué un proyecto declarativo lo estamos tratando mientras él esta afuera con el presidente ¿Por qué no llaman por teléfono al ministro, que es de su propio espacio político, y le dicen ‘podemos discutir cómo vamos a hacer con este maná que nos cayó del cielo'?", ironizó Martín Lousteau.

"Queremos el crecimiento económico y no que la plata se vaya afuera, primero el país tiene que crecer, tiene que haber trabajo", le respondió el jefe oficiaista José Mayans. El proyecto se aprobó con 37 votos, lo justo. Varios oficialistas no votaron.